RESISTIR ES VENCER- Rio colorado

RESISTIR ES VENCER

La vigilia de la Plaza de Río Colorado pone de manifiesto el agotamiento de un modelo nefasto de política. Es la crónica de una muerte anunciada.

Por Víctor Tomaselli[1]

“Si histórico es viejo, este mástil fue levantado en 1963, es decir, tan viejo no es, de modo que no es histórico”, dijo el intendente municipal de Río Colorado entendiendo que hacía una aguda defensa de su intento de remodelación de la plaza principal.

Esta es una forma muy primitiva de análisis, por supuesto errónea desde todo punto de vista. Es un silogismo perfecto que se verifica a sí mismo. Partiendo de una afirmación equivocada trata de convalidarla con un razonamiento que puede parecer lógico, pero que se agota en sí mismo. El ejemplo típico que se da para comprender la naturaleza falsa del silogismo es el siguiente razonamiento: “Nadie es perfecto, yo soy nadie, por ende yo soy perfecto”. En el caso que nos ocupa, a poco de analizar, intuimos primero y sabemos después, que el concepto de “Histórico” es mucho más complejo que el concepto de “viejo”. Eso fue puesto en evidencia en primer lugar desde el corazón de las personas que reaccionaron inmediatamente, de ahí que señalamos que primero lo intuimos, es decir, lo percibimos como sentimiento. Luego fue desnudado palmariamente y “desde la cátedra”, por una brillante exposición del Licenciado Ramón Minieri, que en la misma plaza dio una charla abierta sobre el tema.

Allí analizó el conjunto de elementos constitutivos de la plaza destacando el rol de bien patrimonial, el papel cultural y político de los bienes afectados, pero más que nada exponiendo con total claridad que se estaba ante una afectación muy grave de los derechos colectivos. Un concepto es muy importante entre la abundancia de fundamentos señalados por Ramón Minieri, cuando dijo:

“ESTE ES UN CASO ÚNICO EN LA HISTORIA DEL PATRIMONIO CULTURAL EN ARGENTINA. El avance con topadoras sobre una plaza pública a la que se pretende desarticular, la apelación a la fuerza policial para avanzar en una obra que agrede a un espacio simbólico, son hechos tristemente únicos y de gravedad inusitada.

“Más allá de la anécdota local, interesa destacar que los bienes simbólicos no sólo nos pertenecen a todos; también son aquello que nos unifica como pueblo, como entidades colectivas. En los símbolos hallamos fuerza, motivos para luchar, representaciones en lo colectivo con las que identificarnos. Por ello es cuestión de grave interés público la defensa de un espacio simbólico central y matriz para una ciudad, cual es la Plaza San Martín.”

Es obvio que la torpe visión política del intendente local quedaba al desnudo no solo en sus pobres argumentos conceptuales, sino haciendo evidente la gravedad de su violencia y agresión.

La impunidad constante de estos “baronets” de la política hace que pierdan la noción de la realidad. Lo puso de manifiesto el Concejal Oscar Machado cuando desembozadamente dijo en una nota periodística (que se titula “Machado cree que el amparo es inadmisible”) “personalmente hablé con el juez…” Así comienza ya declarando que cometió un ilícito: Clarito. Esto se llama tráfico de influencias, porque como Concejal no puede hablar directamente con el Juez, menos si tenemos en cuenta la trayectoria política de Machado, tres veces Diputado nacional, sin considerar que siempre fue parte destacada del “Think-Tank” de los seudo-radicales que tienen el secuestrado el aparato estatal de Río Negro desde 1983. En efecto, a poco que leamos el artículo 256 bis del Código Penal en vigencia, nos damos cuenta que este delito de pretender influir en los magistrados es punible con penas de hasta 12 años de prisión.

Pero si desgranamos un poco más las declaraciones antedichas de Machado tenemos el hilo que nos permite dilucidar más: “El amparo debiera (el subrayado nos pertenece) ser declarado inadmisible” continúa diciendo el edil. Subrayamos “debiera”, porque es un tiempo verbal erróneo. Es modo subjuntivo, es decir, señala al objeto como pasivo de una acción casi diríamos imperativa. Lo correcto hubiera sido decir: “el amparo debería ser declarado inadmisible”. Pero ese modo potencial, es decir de algo que puede suceder o no, no cabía en el pensamiento de estos “dirigentes de la nada”. No conciben que algo no salga de acuerdo a sus planes prepotentes.

La realidad de ayer, 2 de febrero les puso un mentís en la cara. Fueron notificados de que el juez interviniente hizo lugar a la medida de no innovar, “…debiendo abstenerse hasta tanto el presente resuelva la cuestión de fondo, de realizar trabajos de roturas de canteros, remoción del mástil, ni borrar los símbolos de pañuelos recordatorios de la lucha de las Madres de Plaza de Mayo y cualquier otra labor que implique modificaciones de la plaza.”

Según publica escuetamente el Diario Río Negro en su edición de hoy (ver: http://www.rionegro.com.ar/diario/rn/nota.aspx?idart=552637&idcat=9544&tipo=2) aunque citan con error el número de expediente que en realidad es 16724/11.Lo importante de destacar en este caso es que ya no les alcanza con el tráfico de influencias desembozado para lograr fallos de la justicia a favor. Entonces la lectura real debería ser otra: se desgrana su poder. Por que la batalla de la plaza es mucho más que eso. Es una batalla contra la impunidad. Por eso la síntesis del cartel que dice “BASTA DE ATROPELLOS” no fue interpretada como lo que es, síntesis del pensamiento de un pueblo. En otros términos la actitud que precede al acto. El acto por venir será expresado en las urnas y sellará el fin de un modelo prebendario.

Ex preso político en la cárcel de Rawson, durante la dictadura de Videla, cuando era dirigente de Juventud Peronista. desembozadamente dijo en una nota periodística (que se titula “Machado cree que el amparo es inadmisible”) “personalmente hablé con el juez…” Así comienza ya declarando que cometió un ilícito: Clarito. Esto se llama tráfico de influencias, porque como Concejal no puede hablar directamente con el Juez, menos si tenemos en cuenta la trayectoria política de Machado, tres veces Diputado nacional, sin considerar que siempre fue parte destacada del “Think-Tank” de los seudo-radicales que tienen el secuestrado el aparato estatal de Río Negro desde 1983. En efecto, a poco que leamos el artículo 256 bis del Código Penal en vigencia, nos damos cuenta que este delito de pretender influir en los magistrados es punible con penas de hasta 12 años de prisión.

Pero si desgranamos un poco más las declaraciones antedichas de Machado tenemos el hilo que nos permite dilucidar más: “El amparo debiera (el subrayado nos pertenece) ser declarado inadmisible” continúa diciendo el edil. Subrayamos “debiera”, porque es un tiempo verbal erróneo. Es modo subjuntivo, es decir, señala al objeto como pasivo de una acción casi diríamos imperativa. Lo correcto hubiera sido decir: “el amparo debería ser declarado inadmisible”. Pero ese modo potencial, es decir de algo que puede suceder o no, no cabía en el pensamiento de estos “dirigentes de la nada”. No conciben que algo no salga de acuerdo a sus planes prepotentes.

La realidad de ayer, 2 de febrero les puso un mentís en la cara. Fueron notificados de que el juez interviniente hizo lugar a la medida de no innovar, “…debiendo abstenerse hasta tanto el presente resuelva la cuestión de fondo, de realizar trabajos de roturas de canteros, remoción del mástil, ni borrar los símbolos de pañuelos recordatorios de la lucha de las Madres de Plaza de Mayo y cualquier otra labor que implique modificaciones de la plaza.”

Según publica escuetamente el Diario Río Negro en su edición de hoy (ver: http://www.rionegro.com.ar/diario/rn/nota.aspx?idart=552637&idcat=9544&tipo=2) aunque citan con error el número de expediente que en realidad es 16724/11.

Lo importante de destacar en este caso es que ya no les alcanza con el tráfico de influencias desembozado para lograr fallos de la justicia a favor. Entonces la lectura real debería ser otra: se desgrana su poder. Por que la batalla de la plaza es mucho más que eso. Es una batalla contra la impunidad. Por eso la síntesis del cartel que dice “BASTA DE ATROPELLOS” no fue interpretada como lo que es, síntesis del pensamiento de un pueblo. En otros términos la actitud que precede al acto. El acto por venir será expresado en las urnas y sellará el fin de un modelo prebendario.

JP DESCAMISADOS RIO COLORADO (RIO NEGRO)